Como disfruté en A Coruña

Estoy muerto. Ayer (bueno, esta mañana) me acostaba a las cuatro y media de la mañana y hoy a "currar" y los ojos se me caen. Pero no me importa, lo vivido ayer no tiene nombre. Un viaje perfectamente organizado por la Federación de Peñas Sevillistas, con mis amigos de Huévar del Aljarafe, con todos los sevillistas con los que coincidimos, con los que me abracé, fue todo maravilloso.



El día de ayer no se me olvidará jamás en la vida, nos lo pasamos en grande, ni "un pero" de lo vivido en A Coruña, ese hermanamiento tan bonito que tenemos con los aficionados del "Depor", todo, me quedo con todo.

El partido fué de pizarra, se lo comenté al Presidente cuando lo ví en el aeropuerto, me acerqué a él, nos abrazamos y lo felicité, estuvimos comentando "pinceladas" del partido. Vaya primera parte para enseñársela a los niños y a los mayores. Esto es demasiado. Más no se puede pedir.

También me emocioné cuando me encontré en el aeropuerto coruñés con mi gran amigo Jesus Alvarado y nos fundimos en un abrazo.



Pero si me tengo que quedar con un momento de ayer, es con el final del partido, todos los aficionados sevillistas gritando "Depor, Depor, Depor", todo el campo aplaudiéndonos y gritando "Sevilla, Sevilla, Sevilla". Así da gusto viajar, con esta gente, con este hermanamiento tan bonito, esas frases que te decían por las calles, las felicitaciones de los aficionados blanquiazules. Ellos están con nosotros, nos quieren, son parte nuestra, y os puedo asegurar, que a partir de ahora, un trocito de mi corazón estará por siempre en A Coruña, con ese equipo que está ahora en "horas bajas" pero que con calma saldrán de esta situación y volverán a ser el verdadero "Súper-Depor".



Aunque no hay que vender la piel del oso antes de cazarlo, tenemos pié y medio en la Final de la Copa del Rey, que con casi toda seguridad jugaremos con el FC Barcelona (que diferencia de final con la de otros años, ¿no? ºOº). Pues si Dios quiere, allí estaremos, en Madrid, el día 23 de junio, en el Santiago Bernabeu, y donde espero estar junto con mis amigos y familia, porque a esta final iré rodeado de mi familia, por lo menos voy a hacer todo lo posible para que me acompañen.





Es momento de disfrutar y saborear lo conseguido, que todos los años no se vive esta fiesta. Por eso quería trabajar hoy, no quiero estar acostado, quiero estar en la calle, ver a la gente, divertirme, hablar del partido, del verdadero "tiki-taka".

Muy grande el sevillismo, demasiado, dando muestras cada vez que viaja de lo enorme que es, de como hacer sevillanía, de como hacer historia y dejar amigos por donde quiera que va.



Gracias papa y mama por haberme inculcado este sentimiento tan difícil de explicar.